En estos últimos días, varios colegas nos han solicitado aclarar con ESVAL, la exigencia de permisos por las cámaras de uniones domiciliarias de alcantarillado en la vía pública.
Sucede que se nos exige tramitar ante la municipalidad los permisos correspondientes para la construcción de la última cámara, cuando esta se encuentra proyectada en la vía publica. (RIDAA art. 91º)... hasta ahí... todo bien.
pero ¿que sucede cuando la cámara es existente?.....
El RIDAA, nos presenta este vacío, al no hacer mención de las instalaciones existentes, y aprovechándose de esa situación, la sanitaria ESVAL, exige tramitar permisos ante los municipios, por mantener la cámara existente, teniendo los proyectistas y contratistas que mentir indicando estas cámaras como proyectadas a construir, para que los municipios otorguen los permisos correspondientes.
Casi todas las municipalidades otorgan dichos permisos, pero en la de Viña del Mar, se niegan a otorgarlos por obras que no se ejecutarán.
Se le hace ver esto a la sanitaria, sin embargo, nuevamente nos encontramos con la intolerancia, y obligan a nuestros colegas a tramitar de todas maneras estos documentos, lo cual se transforma en eternas discusiones que lo único que hacen es dilatar el excesivo tiempo para obtener los permisos o certificados de instalaciones.
Actualmente hemos entregado los antecedentes a la Superintendencia de Servicios Sanitarios, para que sea este ente fiscalizador quien resuelva sobre esta situación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario